Desde el 25 de febrero estoy haciendo las prácticas de educación musical, en el C.P. Luis Vives. Estoy muy contenta tanto con mis alumnos como con mi tutora de prácticas, aunque cada día me estoy dando cuenta de la gran responsabilidad que tienen los maestros en la formación de los niños.
Después de tanto tiempo sin escribir, se me ha ocurrido poneros esta noticia. Sé que no os va a pillar de sorpresa porque es un tema que últimamente se habla en todos los medios:
Una estudiante de 15 años, de 3º de la ESO, ha pedido protección a la policía tras ser brutalmente apaleada a las puertas del colegio de Madrid en el que estudia. La menor tiene miedo. El pasado 7 de marzo fue retada por una compañera de clase. Ella no acudió a la cita, pero su agresora, de 3º de la ESO, igual que ella, la abordó a la salida de clase y la apaleó. Pero no lo hizo sola. En la brutal agresión participó su madre. La tiraron al suelo entre las dos, le dieron puñetazos en la cara y la patearon. Sufrió un traumatismo craneoencefálico…